Todas las caras de la cultura

Abordando temáticas tan diversas como las letras del hip hop, la ética y estética de los movimientos sociales, el espectáculo, y los estudios culturales, Méndez Rubio se adentra en un análisis que procure aclarar las relaciones que establece la cultura en la sociedad actual.

Desde allí, procura desmembrar la propuesta posmoderna de lo visible, v/s lo invisible, lo que refiere como la “transformación de la realidad en imágenes para corregirla en el sentido de distinguir formas alternativas de discurso e imagen, esto es, de producción social de la realidad” .

En cinco artículos, que el autor define como prismas o parte de un caleidoscopio, somete a un riguroso análisis crítico las formas y figuras de la cultura de los últimos años, especialmente el siglo que recién se inicia, procurando acercar definiciones y diferencias notables entre distintas expresiones: cultura de masas, cultura popular, etc., especialmente los complejos mecanismos de invisibilización que ejecuta el poder impuesto, sobre algunos movimientos y experiencias sociales.

En este punto, el autor centra su mirada en el caso, primero, de los grupos que cultivan la estética y ritmo del hip hop y luego en la experiencia del movimiento zapatista en México, puntos que se abordan en los últimos capítulos del texto. Tomando estos dos ejemplos, Méndez revela el complejo binomio de la relación visible/invisible que se hace presente en estas experiencias -desarrolladas bajo el signo globalizador- invisibilidad que, según el autor, es superable bajo la figura de una suerte de revolución invisible . Una revolución cuestionadora, tal como los citados movimientos sobre los que reflexiona, que debiera imbricar trama sobre trama, y red sobre red, hasta hacer aparecer lo desaparecido.

El análisis arroja, en suma, un mensaje esperanzador en el enmarañado escenario posmoderno: una re-validación de la idea y posibilidad de un mundo mejor, mundo que se redefine a partir de los sucesos del 11 de septiembre de 2001, en Norteamérica.

El mensaje troncal de la apuesta, parte desde la invitación a repensar polémicamente y desde una múltiple perspectiva toda la trama de la cultura en tanto práctica social, y ésta desde la lógica de un mecanismo integrador hasta las definiciones de la alta cultura , y la cultura masiva ligada al consumo, análisis que ocupan la atención de las tres primeras partes del libro.

Desde ese punto, inicia una travesía que enjuicia y devela la mayoría de los abordajes y paradigmas que sobre el término cultura se han desarrollado, hasta el “universalismo abstracto de la Cultura moderna” , bajo los actuales aires de la globalización.

La Apuesta Invisible, propone, en el fondo, una serie de acciones críticas y sistemáticas para el propio ojo de quien lee: resistir, cuestionar, y repensar el poder, la cultura, sus relaciones y nudos, en un ejercicio dialéctico en el que culminará toda espera; el anuncio de un cambio irreversible señalado en la lógica de que finalmente “la cara oculta acaba siempre por aparecer”.